Mensaje del Párroco - 19 de abril 2025

Queridos feligreses de San Martín,

El ha resucitado! ¡Verdaderamente, El ha resucitado! En el libro del Eclesiastés, del Antiguo Testamento, el autor se lamenta: “Lo que fue, eso será; lo que se ha hecho, eso se hará; y no hay nada nuevo bajo el sol” (Ecl. 1:9). Hoy celebramos algo nuevo que los autores del Antiguo Testamento apenas podían imaginar: Cristo ha vencido a la muerte, y su Resurrección ha revelado una nueva dimensión en la historia. Esta nueva dimensión, ahora disponible para un mundo caído, es la gracia: “Y de Su plenitud todos hemos recibido gracia sobre gracia. Porque la ley fue dada por medio de Moisés; la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo” (Jn. 1:16-17).

Por la gracia santificante, que recibimos a través de los sacramentos, participamos de la nueva realidad que Cristo instituyó con su Resurrección. En el día de la Resurrección, Cristo infunde su aliento sobre sus apóstoles en el Cenáculo, diciendo: “Reciban el Espíritu Santo” (Jn 20,22). Este aliento de nueva vida proveniente de Cristo Resucitado es lo que conforma todos los sacramentos de la Iglesia: el renacimiento mediante el bautismo; el perdón y la reconciliación mediante la confesión; la plenitud del don del Espíritu en la Confirmación; la comunión con Cristo y la Iglesia mediante la Eucaristía; la participación en el vínculo de amor de Cristo con la Iglesia mediante el matrimonio; el ministerio sacerdotal en el orden sagrado; y la sanación y la fortaleza mediante la unción.

En este día de Pascua, Cristo infunde su aliento sobre toda la Iglesia, diciendo: “¡Reciban el Espíritu Santo!”. Por la fe y viviendo la vida sacramental de la Iglesia, bebemos del Espíritu de Dios, haciéndonos uno con Cristo en su Resurrección. ¡El ha resucitado! Nosotros también resucitaremos con él, porque poseemos su Espíritu. ¡Feliz Pascua!

En Cristo,

P. David